La etapa de plenitud

«Corot es todavía el mejor. Él lo anticipó todo...»
Edgar Degas, 1883

Una de las conclusiones a las que llegó Corot de su trabajo directo ante el motivo al aire libre fue que el color no es algo absoluto, sino que va cambiando según la luz del momento y las condiciones atmosféricas. Esta necesidad que tenía Corot por plasmar la inmediatez de la impresión de su contemplacion de la naturaleza queda plenamente recogido una frase suya a la que siempre intentó ser fiel: “Nunca perder la primera impresión que nos ha conmovido”.

En contraste con otros pintores realistas contemporáneos suyos, como Millet o Courbet, en las obras de Corot no se aprecia ni un ápice de crítica o de compromiso social. Su único compromiso, en su primera etapa, era con la falta de afectación, con la sencillez.

La catedral de Chartres, Corot, 1830
+
La catedral de Chartres
Corot (1830)

Si el academicismo proponía un cuidadoso dibujo y una elaborada factura a base de suaves pinceladas, Corot poco a poco iría abandonando el dibujo en sus obras en beneficio de una mayor espontaneidad en la pincelada. Sus obras cobraban, así, una mayor soltura y naturalidad, y buscaban ser una reproducción fiel de la realidad lejos de las idealizaciones a las que sometía el academicismo al paisaje. Se sentía a gusto con el consejo de su maestro Michallon: “Reproducir, tan escrupulosamente como sea posible, lo que veo frente a mí”. Por este motivo, Corot no congeniaba del todo con los paisajistas de la “Escuela de Barbizon”, que tendían a mostrar una cierta idealización de tintes románticos.

En su obra La catedral de Chartres, de 1830, Corot rompe con algunas de las reglas establecidas para la pintura de edificios y de paisajes. Es muy llamativo que la catedral de Chartres ocupe un lugar secundario, y que vea su protagonismo robado por un montículo y un montón de escombros que la ocultan parcialmente.

En la obra hay un poético contraste entre un producto imponente de la creatividad humana como es la catedral, con el entorno natural (cielo, nubes, árboles...) que la rodea. Las figuras humanas, con actitudes exentas de afectación, contribuyen a realzar este contraste.

Siguiente
 

Guía de accesibilidad
<iframe><noscript><xmp><pre>